
Garnacha tinta
Trilo-Vites
2018 y 2019
5.940 botellas numeradas de un vino con el equilibrio perfecto de un crianza y una gran complejidad de aromas y sabores que le aportan las cepas viejas de garnacha tinta de nuestros viñedos más extremos.
La Guia Peñín ha valorado a nuestro TRILO-VITES 2018 y 2019 como excelentes con una nota de 92 puntos. Todo un reconocimiento al trabajo que estamos compartiendo contigo.
Estas calificaciones se unen a los éxitos obtenidos en Prowein 2022 y en el concurso "Mejores vinos de Aragón" donde obtuvieron la medalla de Oro con 93 puntos.
La industria vinícola de la comunidad autónoma participa bajo el paraguas de "Aragón, Alimentos Nobles", en la campaña de promoción alimentaria del Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, en Fenavin 2022, la feria nacional del vino que se celebra del 10 al 12 de mayo en Ciudad Real.
Un total de diez bodegas --Bodegas Aragonesas, Bodegas El Grillo y la Luna, Bodegas Covinca, Bodegas Hacienda Molleda, Daroca Bodega, Finca Valonga, Jordán de Asso, Lagar D'Amprius, Pago de la Boticaria, San Valero-- forman parte del espacio institucional. Además, otras trece bodegas aragonesas están presentes en la muestra.
GARNACHA DE ARAGÓN
Es una frase natural, nuestra manera de ser. Amar la tierra es nuestra bandera, un sentimiento sobre el que reposa PAGO DE LA BOTICARIA para desarrollar sus actividades y crear vinos únicos. Sólo si somos capaces de entender el suelo, la vida que existe en él, bajo él, sobre él y como se relaciona con nuestras viñas... podemos ofrecer la experiencia que nos hemos propuesto.
Al final nuestro vino refleja esa relación entre la tierra y la viña. Cada una de las añadas tendrá particularidades muy especiales que reflejan la herencia de ese tiempo que ha pasado. Nuestro vino, Trilo-Vites, guarda en una botella un año de acontecimientos en una tierra en la que crecen unos extraordinarios y viejos viñedos, a los que hemos respetado en producción y en cuidado.
25€
Vino tinto originario de nuestras viñas de cepas viejas de garnachas, (Valdespinar, Moncayo, Boticaria...).
Tras un 2017 seco, con lluvias algo por debajo de la media, que finalizó con un otoño-invierno extremadamente seco, las lluvias de abril, mayo y junio triplicaron las habituales, el principio del verano fue caluroso, con algunas tormentas suaves en julio y agosto que prepararon a las garnachas tintas para un buen envero.
En septiembre y octubre la temperatura diurna no superó los 30 grados centígrados, ni la nocturna bajó de 10 grados centígrados. El resultado fue una acidez y un pH perfectos en el momento de la vendimia.
La vendimia comenzó el 18 de octubre realizándose a mano y en cajas, utilizando para elaborar este vino uvas procedentes de los viejos viñedos Sicilia y Pago de la Boticaria.
Las cuidamos bajo el principio de mínima intervención, recuperando métodos tradicionales y respetando las viñas, porque están autorreguladas de forma natural, sin emplear pesticidas sin abonos químicos, ni alteraciones de su dinámica natural. Dejar a la viña que se exprese. Garnachas viejas en vaso, con producciones de menos de 1000 kilos por hectárea, garnachas renovadas obtenidas a partir de las viejas cepas autóctonas todas bajo el mismo principio de mínima intervención.